Ciudad
Concejales trabajan en la legislación sobre la circulación a tracción a sangre en la ciudad
El bloque de concejales del Frente para la Victoria trabaja en un proyecto de ordenanza para regular las distintas formas de circulación en la ciudad. La tracción a sangre, el trabajo de las familias y la seguridad vial hacen de este un tema complej
El
bloque de concejales del Frente para la Victoria trabaja en un proyecto
de ordenanza para regular las distintas formas de circulación en la
ciudad. La tracción a sangre, el trabajo de las familias y la seguridad
vial hacen de este un tema complejo.
En
la mañana del martes, concejales del oficialismo mantuvieron reuniones
con funcionarios y asesores para debatir los detalles de un proyecto de
ordenanza para normar el transporte a través de carros tirados por
animales. El mismo será presentado al reanudarse las sesiones ordinarias
del Honorable Concejo Deliberante, y sin dudas incluirá en sus
definiciones la opinión de distintos actores sociales y la evaluación de
las posibles implicancias.
“Cabe
destacar que más allá de la urgencia que cobró el tema, producto del
reciente accidente en el que un caballo se descontroló y resultó
atropellado, venimos conversando sobre esta cuestión desde el comienzo
de la gestión. Estamos terminando de dar forma” afirmó Juan Pablo Sack,
responsable del área de veterinaria de la municipalidad.
“El objeto de la política pública deben ser todos los ciudadanos”
La
tracción a sangre es parte de la realidad social, laboral y de la vida
urbana de muchas ciudades de nuestro país. Según el registro que lleva
Tránsito municipal, en la ciudad son alrededor de 85 familias
gualeguaychuenses que sostienen su economía doméstica a partir del
trabajo con carros tirados por caballos. Juntan cartón y papel, hierros,
vidrios, y otros materiales reciclables, que luego venden a pequeña
escala y a escaso valor a acopiadores. Son efectivamente el primer y más
inmediato eslabón de una cadena de valorización que se concreta en el
reciclado, y como tal también el sector más vulnerable de este entramado
económico, que mueve importantes cifras. El trabajo de los llamados
“carreros” en muchos casos guarda cierta tradición familiar en la que
los animales son, como en muchas otras actividades, el motor del
sustento diario.
Recientemente
nuestra ciudad vivió un accidente a partir del cual un caballo resultó
atropellado por un automóvil, y con este acontecimiento se pone
nuevamente sobre la mesa la discusión sobre la tracción a sangre en la
ciudad. Al respecto de ello el concejal Carlos Silva afirmó “Aquí
confluyen distintas realidades y opiniones. El accidente en sí nos lleva
al tema de la seguridad vial, y a su vez debemos entender que el dueño
del carro es un trabajador, que alimenta a sus hijos y familia a partir
de lo que recolecta con su caballo”, y agrega: “Es un tema evidentemente
complejo que merece una detenida evaluación, porque involucra tanto el
tránsito en la ciudad como el trabajo de muchas familias de nuestra
pueblo, la mayoría provenientes de sectores humildes. Desde el bloque
del Frente para la Victoria estamos cotejando las políticas
implementadas en otras ciudades, viendo que resultados tuvieron y las
distintas alternativas. Pero indudablemente que el objeto de la política
pública debe atender a la situación de todos los ciudadanos.”
El
Estado Municipal debe generar normas para la convivencia social,
atendiendo a la situación real, económica y laboral, de todos los
actores sociales, en pos de garantizar los derechos.
La norma como fruto del consenso social
La
complejidad del tema y las múltiples implicancias que supone su
regulación obligan a la integrar distintos puntos de vista. Para el
proyecto de ordenanza se prevé entonces el trabajo conjunto con las
familias que utilizan transporte mediante carros, en tanto resulta
imprescindible recoger su opinión como ciudadanos a los cuales afectaría
directamente la eventual ordenanza. Así también esto permitiría contar
con un diagnóstico actual de su situación social y laboral. “La
posibilidad de regular la circulación a tracción a sangre o de su
reemplazo por otros tipos de transporte debe surgir como fruto del
consenso, anclado en las posibilidades ciertas de garantizar el trabajo y
la subsistencia económica. En este sentido, planteamos como necesario
generar reuniones con las familias y elaborar un informe de situación”
afirmó el concejal Omar Sosa que agregó luego:“Lo trágico e impactante
de los hechos nos impulsan naturalmente a la urgencia. Pero ésta no
puede desviarnos de la racionalidad y el sentido social que deben tener
nuestros actos de gobierno.”
Asimismo,
la seguridad vial es una condición ineludible, por lo cual también se
prevé el trabajo conjunto con la dirección de Tránsito, y otras
dependencias relacionadas, para la elaboración del proyecto de
ordenanza.