Este jueves 5 de mayo se conmemora en todo el mundo el Día de la Enfermedad Celíaca con el fin de concientizar sobre esta patología y la importancia de su detección temprana, tratamiento, seguimiento médico y nutricional para mejorar la calidad de vida de las personas afectadas.
Enfermedad Celíaca
La Enfermedad Celíaca es una enfermedad sistémica autoinmune producida por la intolerancia permanente al gluten en individuos genéticamente predispuestos. Afecta la mucosa del intestino, y puede conducir a una mal absorción de nutrientes; los síntomas más frecuentes son: pérdida de peso, diarrea crónica, anemia, distensión abdominal, retraso en el crecimiento, alteraciones del carácter, aparición de aftas bucales. Dependiendo de la sensibilidad individual, los síntomas pueden ser moderados o incluso estar ausentes; pero en algunas personas pueden resultar severamente graves.
Cabe destacar que más allá de la aparición o no de sintomatología, las personas celíacas que consumen alimentos contaminados sufren igualmente lesiones a nivel de la mucosa intestinal, con su consiguiente mal absorción de nutrientes y la posibilidad de desencadenar a largo plazo tumores malignos.
El único tratamiento consiste en una alimentación exenta de gluten de por vida. La alimentación sin gluten se basa en dos premisas fundamentales:
- Eliminar todo producto que tenga como ingrediente trigo, cebada, avena, centeno y sus derivados
- Eliminar cualquier producto contaminado con estos cereales
De acuerdo a la clasificación de peligros establecida por el Codex Alimentarius, el gluten, es un peligro químico, y la valoración de la gravedad de las consecuencias es de mediana a alta (considerando que pequeñas trazas de dicho contaminante puede causar eventos severos y agudos en individuos muy sensibilizados).
Desde el área de Bromatología recordamos que los alimentos libres de gluten (ALG) son aquellos que no tienen en su composición, ni estuvieron en contacto, con gluten derivado de trigo, avena, cebada o centeno (TACC).
Contaminación cruzada
El gluten puede introducirse en un alimento involuntariamente durante el proceso de industrialización, a través de superficies, aire, equipos, utensilios entre otros. Por tal motivo, es recomendable que se consuman únicamente aquellos alimentos que estén autorizados como libres de gluten.
La contaminación cruzada puede ocurrir en cualquier etapa de la fabricación de un ALG como consecuencia de formulación incorrecta, secuencia de producción inadecuada, procesos de limpieza y saneamiento deficientes, error humano, entre otros. O bien en etapas posteriores que implican una manipulación antes de llegar al consumidor, siendo éstas las más frecuentes y peligrosas.
Es por ello que nuestro Código Alimentario Argentino enuncia que la elaboración de productos “Sin TACC” deberá cumplir con las exigencias de ALG y para su aprobación, los elaboradores y/o importadores deberán presentar ante la Autoridad Sanitaria análisis que avalen su condición y un programa de Buenas Prácticas de Fabricación, con el fin de asegurar la no contaminación en los procesos, desde la recepción de las materias primas hasta la comercialización del producto final.
Del producto industrializado a la necesidad del consumidor
Las Autoridades Sanitarias son las encargadas de solicitar todos los requisitos necesarios para garantizar la calidad de los ALG y los mismo suelen ser muy rigurosos; entre los requisitos se destacan manuales de procedimientos y registros de todas las operaciones realizadas durante las etapas de elaboración (Diseño y Áreas de Trabajo, Ingreso de mercadería, Almacenamiento, Egreso de mercadería, Materias Primas e Insumos, Evaluación de Proveedores, Selección y Aprobación de Proveedores , Monitoreo de Proveedores Aprobados, Transporte, Recepción, Almacenamiento, Elaboración, Envasado, Rotulado, Plan de Validación, Higiene y Desinfección, Retiro de Mercado, Plan de Capacitación del personal, Evaluación de Desempeño, Auditorías Internas) contemplado desde la recepción de las materias primas hasta el envasado y distribución, que el profesional universitario redacta, transmite y realiza el seguimiento de su cumplimiento tal como lo indica el Art. N°1346 de C.A.A. . De este modo los ALG industrializados suelen ser seguros.
La mayor problemática radica en aquellos ALG que no se consumen en sus envases originales de fabricación o que por algún motivo los mismos consumidores requieren fracciones o porciones menores. Entendiendo que cualquier práctica que se realice (incluso el mismo fraccionado) debe ajustarse a lo dispuesto en la reglamentación vigente arriba mencionada.
Otra problemática emergente que puede generar serios inconvenientes a personas celíacas son aquellos establecimientos que elaboran sin estar habilitados y que por ende pueden no cumplir con todas las exigencias establecidas por la legislación vigente y poner en riesgo de este modo la salud de los consumidores.
Legislación alimentaria relacionada
Nuestro Código Alimentario Argentino (C.A.A.) considera a los ALG como alimentos dietéticos o para regímenes especiales; en su Artículo N°1383 los define; y establece que debe certificarse mediante análisis de laboratorio oficial su condición de “Libre de Gluten”.
El mismo C.A.A. en su Artículo N°1346 explicita: "Todo establecimiento que elabora alimentos dietéticos ó para regímenes especiales comprendidos en este capítulo, deberá contar con la Dirección Técnica de un profesional universitario”… agregando: …” el que además asumirá conjuntamente con la empresa la responsabilidad ante las autoridades sanitarias de la calidad de los productos elaborados. Las empresas elaboradoras deberán asegurar el control analítico de las materias primas, productos en elaboración y productos terminados"….
Asimismo en el Artículo N° 1341 se indica: … "Los alimentos dietéticos o para regímenes especiales deberán ser acondicionados en su lugar de elaboración o en otras plantas de la misma empresa en envases que satisfagan las exigencias del presente Código y rotulados reglamentariamente, quedando expresamente prohibido el fraccionamiento y expendio a granel o al detalle"…
En lo expuesto anteriormente radica la importancia de la correcta elaboración (desde la adquisición de las materias primas) pasando por todos los eslabones de la cadena agroalimentaria (procesado, almacenamiento, transportes, venta mayorista, minorista, etc.) hasta el consumo por parte de la persona celíaca; donde cada actor que manipule estos alimentos o cualquier utensilio, equipamiento o práctica que los involucre, desde el inicio al final de la cadena, juega un rol fundamental en la salud de las personas que padecen esta enfermedad. Es de destacar que NO cualquier alimento puede llevar el logo de sin TACC.
Fuentes:
- Código Alimentario Argentino. CAPÍTULO XVII.
- Guía de Buenas Prácticas de Manufactura. Establecimientos Elaboradores Libre de Gluten. ANMAT.
- Directrices para la Autorización de una Alimento Libre de Gluten. Programa Federal de Control de Alimentos. CONAL.
- GUÍA DE RECOMENDACIONES PARA UN MENÚ LIBRE DE GLUTEN SEGURO. RENAPRA – ANMAT.
[1] Buscador Listado ALG: http://www.anmat.gov.ar/Alimentos/libres_gluten/Alimentos_Libres_de_Gluten.asp
Para mayor información dirigirse al e-mail [email protected]