Concurso familiar de huertas
Con la participación de más de 40 familias, se llevó a cabo esta enorme experiencia en las barriadas de la ciudad. Las huertas son la relación más tangible con los alimentos sanos.
Con la participación de más de 40 familias, se llevó a cabo esta enorme experiencia en las barriadas de la ciudad. Las huertas son la relación más tangible con los alimentos sanos.
07 de Febrero 2019 PASSS
Francisco Ojeda es un joven ingeniero agrónomo que se acercó al Passs como voluntario con la intuición de la agroecología ya que "venía del lado contrario, la agricultura con químicos. Otra cosa". Al tiempo, desde la secretaría de Desarrollo Social de la Municipalidad de Gualeguaychú le solicitaron al Passs su colaboración para realizar un concurso de huertas familiares en tres barrios populares para que cada vecino pudiera generar su compostera y aprovechar la separación de residuos que se hace a nivel municipal. Es cuando se ofreció Francisco para brindar la capacitación técnica a las familias interesadas en formar parte del concurso.
Cada grupo contaba con un padrino o madrina, cualquier persona que quisiera acompañar. Si bien varios voluntarios eran promotores de INTA, no era requisito saber de horticultura pero si estar dispuestos a seguir el proceso. Para Francisco “no se trató de hacer una huerta sino que se brindó la motivación de la actividad diaria, la dignidad de una familia que generó un alimento sano sin ningún tipo de agroquímico, que es la impronta del PASSS, fomentando la fertilidad natural de los suelos".
La primera capacitación se brindó junto al INTA, el organismo que proveyó las semillas del programa ProHuerta. "Los vecinos estaban muy contentos y ansiosos por recibir las semillas. La idea fue que cada padrino los visitara una vez por mes y eso se convirtió en un acompañamiento más profundo. Ir a hacer la recorrida, estar en contacto, no pasa por lo técnico sino por lo humano. Hay gente muy sola, muy abandonada y el solo hecho de pasar, compartir, tomar un mate, colabora" cuenta Francisco. Pero el terreno no siempre responde. "Los barrios están asentados sobre rellenos, se han compactado los suelos que son pesados y arcillosos. Cuando arrancaron a hacer los primeros almácigos, la tierra era una goma. Volví al mes y las plantitas se veían chiquitas en los camellones” explica como técnico. Entonces decidieron traer un camión de compost del Ecoparque, fruto de la recolección diferenciada de los residuos orgánicos que hacen los vecinos y vecinas de Gualeguaychú.
En la recorrida final se definieron los ganadores entre las familias que compartieron la aventura de volver a generar sus propios alimentos. Ahora la experiencia se va a replicar. Para el joven ingeniero, lo que aportó el Passs es importante “no es apenas el hecho de ofrecer qué comer. La gente está contenta. Sé que la transformación tarda en llegar pero la alimentación sana se relaciona con las huertas, es lo más tangible. El tema de los barrios es muy limitado, no tienen palas ni rastrillos y la mayoría hizo su huerta. Nosotros hablamos de agricultura, esto parece algo pequeño, algo poco visible en relación al resto de las tareas del Passs pero no se tiene que perder”.
Paola Guimaerens, promotora territorial. “Los resultados nos superaron a nosotros también”
Paola Guimaerens fue una de las creadoras del concurso. “Decidimos armar las huertas familiares a raíz de una evaluación del equipo de tratamiento comunitario ya que hace unos diez años tuvimos con los gurises una huerta comunitaria que fue una experiencia muy linda, articulada con la comisión vecinal. Entonces decidimos rescatar esa experiencia a nivel familiar lo que motivó a diferentes grupos etarios. Participaban los niños, los adolescentes, los grandes. Fueron 40 familias las que continuaron con la huerta logrando resultados muy positivos que superaron nuestras expectativas”.
Además Paola Guimaerens explicó que “hubo varias instancias previas al concurso en el barrio. Se descacharrizaron los patios que estaban muy abandonados, se limpiaron los fondos de las casas hasta encontrar el lugar donde hacer la huerta” y continuó “este proyecto implicó un trabajo articulado con Higiene Urbana y también con veterinaria municipal dado la gran cantidad de presencia de perros a los que se castró y para los que se cercó la huerto”.
Plaza San Martín
Con un cronograma lleno de presentaciones, ceremonias y el emotivo cierre con la Luz de Belén, el evento promete ser un espacio de encuentro, fe y esperanza para vecinos y turistas.
Jueves 24 de octubre a las 20 h.
Sábado 14 de diciembre - 20 h en Museo Azotea de Lapalma