Desde hace dos años y medio desde la Municipalidad se está trabajando en el estudio y posterior consolidación de herramientas de gestión urbanística, labor que se lleva a cabo a través de un equipo perteneciente a la secretaría de Hábitat abocado exclusivamente a la puesta en marcha de procesos de Planificación Territorial.

En la primera de cuatro jornadas de trabajo a las cuáles fueron invitados a participar todos los concejales y funcionarios, el equipo de Hábitat acompañado por IGC, propone una actividad durante la cual se constata que  “el Acceso a la Tierra y, posteriormente, a la vivienda”, es la principal preocupación que tenemos para con nuestra ciudad.

Estudiar, Diseñar, Ensayar y finalmente implementar herramientas que nos permitan dar respuesta a ésta problemática es uno de los principales ejes de nuestro Plan de Ordenamiento Territorial, y lo hacemos asumiendo la responsabilidad política indelegable del Estado Municipal sobre la Planificación Territorial.  

Así lo ratificó en su visita a nuestra ciudad el Arquitecto y Especialista en Planificación Urbana y Regional Eduardo Reese, quien invitado por el Colegio de Arquitectos de la Provincia de Entre Ríos, brindó una Charla sobre Hábitat y Urbanismo, durante la cual afirmó que una política pública de Ordenamiento Territorial es importante “Porque las formas y densidad de la ocupación del suelo y el modo en el que se despliegan las actividades humanas en el espacio y su interrelación (articulación) tienen una directa vinculación (impacto) con las condiciones y la calidad de vida de la población”.

“En dicha charla, a la que fue invitado el equipo de Hábitat junto a todos los Concejales integrantes de nuestro HCD, pudimos constatar que las políticas abordadas hasta el momento por dicho equipo van en consonancia con nuestro principal objetivo: el de lograr una ciudad inclusiva en donde todos los vecinos tengamos el derecho de acceder a sus beneficios por igual” destaca el subsecretario de Planeamiento, Pablo Bugnone, que añade: “En este sentido, el Banco de Tierras Municipal es una herramienta muy valiosa que nos permite alcanzar hoy las 60 hectáreas de tierra que estamos comenzando a lotear para venderle a nuestros vecinos a un precio razonable y justo, previa aprobación del Honorable Concejo Deliberante”.

Continuando con el Arq. Reese, y tratando de comprender mejor la ciudad occidental, modelo del cual no escapa la nuestra, afirmamos que el territorio es un sistema complejo y que como tal requiere de respuestas complejas. “El conflicto base que subyace a todas ellas es el que surge de la interrelación entre Política Pública y Propiedad Privada del Suelo. ¿Cómo puedo regular algo que trata de no ser Regulado?” Países como España, Alemania, y ciudades como Nueva York y Bogotá (algunos de los ejemplos que citó el Arquitecto), parecen haberlo entendido muy bien, ya que en ellos el Estado tiene una PRESENCIA ACTIVA en el mercado inmobiliario y  según el arquitecto “esta intervención se debe a que los mecanismos del mercado no pueden garantizar el uso sostenible y equitativo del territorio  porque:

1. El mercado califica el suelo diferencialmente / Solo se dirige donde existe demanda solvente.
2. Valoriza el suelo diferencialmente.
3. Diferencia a los sectores sociales en el espacio generando una segregación socio territorial.

Éstas lógicas del mercado producen fuertes contrastes socio/territoriales. La tenencia de tierra de forma improductiva es una de ellas y contribuye al aumento del valor de la tierra dentro de las zonas urbanizadas. Esta tierra ociosa se saca del mercado generando escasez, aumentando la demanda y consecuentemente el precio, situación que expulsa a las personas hacia zonas más alejadas de la ciudad debido a que no pueden acceder a lotes con altos costos en las áreas urbanizadas.”

Para dar respuestas a estos procesos planteados por el Arq. Reese en su ponencia con los cuales nos sentimos identificados, es que estamos trabajando en la implementación de nuevas herramientas de gestión y en la profundización de algunas ya existentes, como la de Sobretasas a inmuebles ociosos (improductivos) dentro de la Planta Urbana, actualmente en tratamiento en el HCD. Es desde el mismo Concejo Deliberante donde se están convocando en una instancia participativa muy valiosa a numerosos actores de nuestra ciudad como profesionales e instituciones involucrados en la temática, a emitir sus juicios y valoraciones sobre éstas herramientas.

“También nos acompañan en este proceso: IGC (Instituto de gestión de Ciudades), integrado por reconocidos profesionales pertenecientes a la Universidad Nacional de Rosario y dirigido por el Arq. Roberto Monteverde, con quienes firmamos un convenio en donde la institución hizo una evaluación sobre el proceso que estamos realizando; también la Cátedra de Urbanismo de la Facultad de Arquitectura de Rosario, presidida por el Arq. Oscar Bragos, con quienes firmamos un convenio de co-participación, motivo por el cual hemos viajado a exponer nuestros avances frente a los alumnos de la cátedra y en el transcurso de esta última semana hemos recibido la visita de 120 alumnos de dicha Facultad acompañados por sus docentes” explicó Ricardo Delvecchio, secretario de Hábitat.

Soñamos con que cada familia que no tenga, pueda acceder a su lote de tierra para su vivienda propia, motivo por el cual es nuestra voluntad que la tierra improductiva se movilice para dar respuestas a ésta y  otras demandas: la producción de alimentos sanos, la presencia de instituciones como escuelas, comisarías y centros de salud donde sea necesario y el desarrollo de otros proyectos urbanísticos que reactiven la economía local, generando demanda de insumos y mano de obra que se traduzca en más posibilidades de trabajo para los vecinos. 

Es por eso que haciendo eco de lo que expuso el Arq. Reese es que decimos que nuestras políticas territoriales tienen como objetivo la inclusión y la sustentabilidad y uno de los principios fundamentales sobre los que se apoya es el de “función SOCIAL de la ciudad y de la propiedad”, por eso es que “el URBANISMO es una función pública que implica la obligación indelegable de los diferentes niveles del Estado a garantizar la defensa de los derechos colectivos y que así como se responsabiliza sobre la Educación y la Salud debería responsabilizarse sobre la VIVIENDA”.