En el marco del Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, la Municipalidad llevó adelante un conversatorio que contó con la participación de especialistas en diversas disciplinas vinculadas a la prevención y el tratamiento de esta enfermedad. La charla estuvo a cargo de la Dra. Diana Sosa, médica oncóloga; la Dra. Sabina Gotusso, médica tocoginecóloga; la psicóloga Sofía Rosello; la nutricionista Elina Schauman; la licenciada Silvana Olivera, integrante de LALCEC.

 

 

"La prevención y tratamiento de esta enfermedad sólo se explica y es abordable desde la interdisciplinariedad y una concepción integral de Salud que abarca los aspectos sociales, psicológicos, genéticos, ambientales y sanitarios." explicó Karen Bouchaton, directora de Salud Comunitaria.

 

 

Según la Sociedad Argentina de Mastología durante el año 2020 se han realizado un 40% menos de mamografías en el país en relación al año pasado. "La mamografía y eco grafía indicados según edad y situación de salud de la persona son una herramienta fundamental en la prevención, porque permiten ver lo que aún no puede verse o palpar, ya que cuando un nódulo es palpable en la mama lleva años de evolución. Por eso insistimos en que los controles integrales no cesan por la pandemia" agregó Bouchaton. 

 

 

 

 

Cabe destacar que la aparición de la enfermedad tiene que ver con factores genéticos hereditarios y pero también emocionales, psicológicos, y estado de salud. "Lo que sentimos, vivimos expresamos y callamos, con nuestro estilo de vida, lo que comemos, el ejercicio que hacemos, incide mucho" concluyó Bouchaton. 

 

 

Compartimos algunas claves para la prevención del cáncer de mama.

 

 

¿Qué factores elevan el riesgo de desarrollar cáncer de mama?

 

• Sobrepeso: las mujeres obesas y con sobrepeso (BMI mayor a 25) tienen más riesgo de padecer un cáncer de mama y de volver a tenerlo (recurrencia) que las mujeres que tienen un peso saludable. Esto se debe a la producción de estrógenos en el tejido graso.
   
• Falta de ejercicio: las personas que realizan actividad física pueden controlar de forma más eficiente el peso, reduciendo así los niveles de grasa en su cuerpo.
   
• Alcohol: puede aumentar los niveles de estrógenos en nuestro cuerpo así como también puede aumentar el riesgo de cáncer de mama y de otras localizaciones al dañar el ADN de las células. Las mujeres que consumen tres tragos semanales tienen un 15% más de riesgo de cáncer de mama que las mujeres que no consumen bebidas alcohólicas
   
• Tabaco: fumar no sólo aumenta la posibilidad de desarrollar cáncer de mama u otros tipos de cánceres sino que también puede producir otras enfermedades que compliquen el tratamiento del cáncer de mama (alteración de la vascularización y circulación sanguínea , afecciones pulmonares).

 

¿Qué hábitos contribuyen a reducir el riesgo de contraer cáncer de mama?
Para reducir al mínimo las posibilidades de desarrollar un cáncer de mama, se aconseja llevar un estilo de vida saludable y adoptar hábitos que contrarrestan a los factores de riesgo modificables:

• Mantener un peso adecuado
• Hacer ejercicio con regularidad
• Limitar el consumo de alcohol
• No fumar
• Tener una dieta variada y nutritiva.

 

Fuente: Sociedad Argentina de Mastología.