La Municipalidad de Gualeguaychú desde su área de Bromatología de la Subdirección de Inspección General y dentro del Programa de Cocina Responsable: “Elaboración y manipulación cuidada de alimentos” que lleva adelante la Dirección de Salud Comunitaria, el cual tiene como objetivos brindar información y concientizar a los consumidores y manipuladores sobre su rol fundamental en la prevención de las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA´s), dando información acerca del mantenimiento de los tanques reservorios de agua potable, para que se mantengan limpios y desinfectados, y así garantizar que la calidad del agua de red pública se mantenga hasta su uso y/o consumo, en condiciones de aptitud tal como provee, la Dirección de Obras Sanitarias de la Secretaria de Obras y Servicios Públicos.

Todos los tanques destinados al almacenamiento de agua para consumo, elaboración y operaciones de limpieza y desinfección, tanto de uso domiciliario, instituciones, comercios, industrias, y sobre todo establecimientos que elaboren alimentos, se deben limpiar y desinfectar, para evitar que puedan convertirse en una fuente de contaminación del agua que contienen.

 

Se recomienda realizar una limpieza periódica y adecuada de las cisternas y los tanques de almacenamiento, a fin de que el agua potable suministrada a través de la red pública mantenga la calidad con la que se provee.

 

Los reservorios también deben estar provistos de una tapa de cierre correcto, convenientemente sellada y fijada para que no ingresen pájaros, insectos y otras plagas, basura, polvo, etc. que afecten la calidad del agua. Además si el tanque posee algún tipo de ventilación, la misma debe contar con tela mosquitera del menor diámetro posible.

 

A continuación, se sugiere una guía práctica para la correcta limpieza y desinfección de los tanques reservorios de agua potable: 

 

1- Cierre la llave de ingreso de agua al tanque. Luego haga lo mismo con la válvula del colector (cañería de distribución interna) y abra la válvula de limpieza hasta quedar un fondo con agua de 15 cm aproximadamente. NO AGITE ese resto ni la suciedad que contiene.

2- Limpie el fondo, las paredes y la tapa del tanque con la ayuda de un cepillo o escoba de plástico (de primer uso). Sólo use agua, NUNCA USE un cepillo de metal u otro elemento como detergente, jabón, polvo limpiador, etc.

3- Vacíe el tanque completamente y enjuague varias veces. Elimine los residuos por la válvula de desagüe, NO por la cañería de distribución. 

4- Llene el tanque hasta la mitad con agua. Agregue por cada 500 litros de capacidad del tanque 2 litros de lavandina concentrada y continué llenando el resto del tanque.

5- Una vez lleno el tanque, deje actuar como mínimo durante 3 horas. Elimine el agua por la válvula del colector (cañería de distribución interna) haciéndola salir por todas las canillas internas del domicilio (ESTA AGUA NO SE PUEDE USAR); y vuelva nuevamente a llenar y vaciar el tanque hasta eliminar el exceso de cloro, para que se complete su lavado y desinfección.

6- Llene el tanque y póngalo en servicio. RECUERDE que su tanque debe estar provisto de una tapa con cierre de manera que no ingresen elementos contaminantes.

 

Es recomendable realizar esta práctica cada 3 a 6 meses en establecimientos que elaboren alimentos y por lo menos 1 vez al año para particulares; recordando que la limpieza y desinfección de los tanques corresponde y es responsabilidad de cada vecino. 

 

Por consultas o mayor información dirigirse al Área de Bromatología de la Subdirección de Inspección General, sito en calle España 423. O bien, comunicarse a través del teléfono 3446-423399, o por e-mail a [email protected]