El Gobierno de Gualeguaychú continúa con la recuperación integral de la infraestructura urbana en una de las zonas más afectadas por el deterioro de la red sanitaria. En esta oportunidad, las tareas se concentran en calle Rucci, entre Del Valle y 3 de Caballería, donde se repararon las losas de hormigón que se demolieron durante el recambio de cañerías del sistema cloacal.

El trabajo forma parte de una planificación integral que busca dar una solución o un paliativo a los problemas estructurales que desde hace años afectan a los vecinos del sector. La intervención comprende la reconstrucción de los paños de pavimento, el sellado de juntas y la nivelación de superficie, garantizando la durabilidad de la obra y una correcta transitabilidad una vez habilitado el tramo.

En la esquina de Del Valle y Rucci, más específicamente, los equipos municipales constataron que dos paños de hormigón estaban levantados, lo que permitía el ingreso de agua pluvial por debajo de las losas. Esta situación generaba un proceso de socavamiento progresivo que debilita la base del pavimento y provoca roturas, baches y hundimientos que dificultan la circulación.

En otras palabras, el agua que se filtra por debajo de las losas actúa como un agente erosivo, arrastrando el material de base y dejando huecos que, con el paso de los vehículos, terminan colapsando la estructura. Por esta razón es que, además del reemplazo de las cañerías, se debió hacer la correcta reconstrucción y sellado del pavimento, para evitar futuras filtraciones y garantizar un drenaje adecuado del agua de lluvia.

Durante el período de fraguado, las zonas intervenidas permanecen cerradas al tránsito, delimitadas con vallado naranja y estructuras de madera pintadas en rojo y blanco, a fin de resguardar tanto el trabajo como la seguridad de los vecinos.

Estas tareas no se realizan de manera aislada, sino que integran una reparación escalonada y planificada de todo el sistema cloacal dentro del cuadrante comprendido por las calles Buenos Aires, Lavalle, 3 de Caballería y Rocamora, una de las áreas que más daños estructurales presenta debido al envejecimiento de las cañerías y a la filtración constante de líquidos cloacales.

En los últimos meses, el Municipio también intervino en Concordia, entre Rucci y Rocamora; en avenida Del Valle, entre Rucci y Rocamora; y en Rucci, entre Buenos Aires y Concordia, consolidando un circuito de obras que abarca distintos puntos de la red sanitaria y vial.

Cada una de estas acciones responde a una planificación iniciada el año pasado, con el propósito de dar respuesta a un reclamo histórico de los vecinos que conviven desde hace décadas con problemas cloacales y hundimientos en la calzada.

El reemplazo de las cañerías antiguas por material nuevo y de mayor capacidad, sumado a la reparación integral del pavimento, permitirá resolver o mitigar las dificultades de saneamiento y tránsito que afectaban a esta zona del casco urbano.

Con cada nueva intervención, el Municipio reafirma su compromiso con una política de mantenimiento y mejora constante de los servicios básicos, impulsando obras que no solo corrigen daños visibles, sino que también previenen futuros deterioros.